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ME ENCANTA:

Cambiar de ciudad

Uno de los temas que plantea el comienzo de Patito Feo es cómo vivir en una ciudad o en otra puede cambiarlo todo. En el caso de Patito, de una vida tranquila y más o menos feliz pero incompleta en Bariloche, pasa a las oportunidades que le ofrece una gran ciudad como Buenos Aires: las de encontrar el amor, redescubrir su familia y su pasado, aprender a cantar… Pero también el cambio podría sentarle fatal, ¿verdad?: traumas que antes no afloraban, relaciones peligrosas y muchos disgustos que hasta ahora se había ahorrado. ¿Es el precio de la felicidad?

 

Al fin y al cabo, cambiar de ciudad siempre supone un pequeño riesgo, aunque también puede ser un reto genial tratar de desenvolvernos bien en un lugar distinto. Hace un par de años, yo mismo tuve que cambiar de ciudad para completar mis estudios. De pronto, me vi en una ciudad enorme en la que no conocía a nadie y en la que me sentía bastante perdido al principio. Pero, no te creas, también estaba alucinado con la cantidad de gente a la que podía conocer cada día, la de sitios nuevos que descubría a cada paso. En resumen, que es como si tuvieras que empezar de cero, algo parecido a lo que vive Patito en la serie que emite Cartoon Network.

 

Y tú, ¿has tenido que cambiar de ciudad (o de casa, al menos) alguna vez?

¿Te costó mucho adaptarte a la nueva situación?